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“Sombra imborrable del Josco

sobre la loma que bordea el valle del Toa”

El insigne escritor cagüeño Abelardo Díaz Alfaro nace el 24 de julio de 1916. El más famoso cuentista criollista que ha producido la literatura puertorriqueña del siglo 20. Don Abelardo nos dejó una radiografía auténtica de lo que era el puertorriqueño a principios del siglo pasado. Con su pluma pudo mostrarnos, como en una hermosa pintura, las cualidades de un pueblo que se ha caracterizado por su lucha por mantener su identidad ante el Imperio más grande del mundo, Estados Unidos.

 

En su libro Terrazo (1947) incluyó un cuento extraordinario, El Josco; toro bravo que lucha por su libertad, por su dignidad, por mantener el propósito de su vida: ser padrote y no buey de carga. El Josco no nació para estar enyugado, sino para mantener su especie. Nació para luchar, para recorrer la llanura en libertad. Nadie tenía el derecho de quitarle lo que por naturaleza le correspondía.

 

Pero el viejo dueño de la hacienda necesitaba otro toro, un padrote que mejorara la especie, un toro blanco. El viejo condenó al Josco al yugo y puso de padrote al toro blanco. El Josco prefirió escapar y recorrer la llanura airado, herido, molesto. Finalmente, se enfrentan los dos toros en una lucha mortal ante el asombro de los campesinos, que alentaban al Josco a acabar con aquel enorme toro que había venido a robarle su territorio.

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Pero el toro blanco se lleva la victoria... El Josco busca el escape y ante la derrota, la vergüenza, la ira decide poner fin a su vida cayendo por un barranco...

 

Tras haber sido víctima de un asalto, su salud comenzó a deteriorarse a principios de la década del 1990 y luego de varias hospitalizaciones muere el 22 de julio de 1999.

 

Para conmemorar el décimo aniversario de la partida física de Díaz Alfaro, en el 2009 el entonces alcalde de Caguas, William Miranda Marín designa el Paseo de las Artes con su nombre, así como también su anfiteatro para que Caguas honrara su obra literaria.

 

Bellas Artes de Caguas se unió a tan importante efeméride, convocando a tres importantes artistas plásticos para un mural conmemorativo. Héctor Escalante, Arturo Vilmenay y Alwin Riomonte. La obra ubica en las afueras de Bellas Artes de Caguas contiguo al Paseo de las Artes para el disfrute y admiración de todos. Para perpetuar la obra se imprimen unos afiches serigráficos para inmortalizar la pieza.

 

Con el paso de algunos años, estos afiches, de edición limitada, fueron preservados celosamente y hoy a más de una década de su impresión han sido rescatados y deseamos compartirlos con los amantes del arte para además celebrar los 75 años de Terrazo; libro donde está contenido El Josco.

 

Bellas Artes de Caguas es el custodio de cientos de obras de arte público para el disfrute de los visitantes. Bellas Artes de Caguas vive el arte y todas sus manifestaciones artísticas.

 

Por un corto tiempo, tendremos estas piezas de colección de gran valor histórico-cultural a la venta. Para las primeras 100 personas que deseen adquirirlas. Las serigrafías están numeradas y firmadas por los artistas.

 

Lo recaudado servirá para continuar promoviendo el arte y la cultura en Bellas Artes de Caguas.

 

Exhortamos al pueblo a visitar Bellas Artes de Caguas para todos los eventos artísticos y culturales, así como la oferta gastronómica, pero también apreciar el mural pictórico que se encuentra en nuestras facilidades. De igual forma contiguo al anfiteatro se encuentra el Josco obra de la artista cagüeña María Elena Perales.

 

Para más información de cómo obtener esta pieza de colección puede comunicarse al 787.653.5324 ext. 236 o escribir a daniel.morales@bellasartescaguas.com

 

Biografías de los artistas

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Héctor Escalante Rivera -Artista Puertorriqueño. Estudió en la Escuela de Artes Plásticas en San Juan, Puerto Rico. Recibe una beca para proseguir estudios especializados en artes gráficas (grabado en intaglio y otras técnicas) en el “Printmaking Workshop” en la ciudad de Nueva York, E. U. Ha expuesto su obra en infinidad de ocasiones localmente e internacionalmente. Considerado uno de los mejores serigrafistas de su país, por años ha diseñado e impreso carteles y serigrafías para eventos culturales y otras actividades celebradas en Puerto Rico. Su trabajo ha sido incluido en el libro “Arte Iberoamericano Contemporáneo” publicado en Argentina en el año 2005. “Mi pintura sencillamente trata acerca del color, la luz y el movimiento de las formas. Puerto Rico es una isla en el Caribe tropical con verdes montañas, cielos y mares de azul profundo, explosión de rojos, amarillos, naranjas, violetas en sus hermosas flores... riqueza de luz y color en todas partes... como mi obra”. Exposiciones: • Galería Viento y Agua, Caguas, Puerto Rico (2005) • Museo de Arte de Caguas, Puerto Rico (2004) • New York University (NYU) NewYork, NY USA (2004) • “Los Aromas del Color”, Universidad del Turabo, Caguas, Puerto Rico (2004) • University of Manitoba, Canada (2004) • The Eastern Oregon University, Oregon USA (2004) • University of Delaware, Delaware, USA (2004) • “Outspoken Art” - University of Vilanova, Philadelphia, USA (2004) • Centro de Bellas Artes, Caguas, Puerto Rico (2003) • Universidad del Turabo, Caguas, Puerto Rico (1997) • Cork Gallery, Lincoln Center, New York, NY, USA (1985) • 1era Muestra de Gráfica Puertorriqueña, San Juan, Puerto Rico (1980) • “V Muestra de Gráfica Latinoamericana, La Habana, Cuba (1975)

 

Arturo Vilmenay es un artista autodidacta. Vive en Caguas, Puerto Rico, donde tiene su estudio. La pasión que siente por la vida y el arte puede ser visto claramente en su lienzo lleno de color. Estudiar la naturaleza y experimentar con la teoría del color le permite crear hermosos efectos de luz y sombra en sus obras. En 1947, después de graduarse de la Escuela Superior José Gautier Benítez en Caguas, Vilmenay se traslada a Nueva York donde comienza a trabajar como ilustrador para varias agencias de publicidad. Arturo obtiene gran parte de sus conocimientos artísticos asistiendo a seminarios de arte y visitando frecuentemente los museos. Es entonces cuando comienza a experimentar con óleos, acrílicos, acuarelas, pastel, dibujos a lápiz, serigrafía, la escultura y el aerógrafo. Desarrollando su propio estilo siendo en aquél momento un estilo más realista. A su regreso a Puerto Rico, 18 años más tarde, Arturo sigue trabajando como artista independiente.

 

Alwin Rivera “Riomonte”

Humacaeño. De 1973 a 1979 ingresa a Artes Plásticas en Madrid España. Logrando un postgrado en escultura y dibujo. En 1982 regresa a Puerto Rico para dar clases en la Escuela de Artes Plásticas hasta 1988. En 1989 inicia su trabajo como escultor independiente hasta el día de hoy logrando proyectos escultóricos de la talla de Felipe Rodríguez en Caguas. Sus trabajos han sido altamente reconocidos tanto a nivel público como privado.

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